jueves, 15 de diciembre de 2016

SALVADOR Y DIEGO CÓRDOVA




RAMÓN BADARACCO





 SALVADOR  Y
 DIEGO CÓRDOVA.






CUMANA 2016













Autor: Tulio Ramón Badaracco Rivero
Que firma Ramón Badaracco
Título de la obra:

SALVADO Y
DIEGO CORDOVA

Diseño de la cubierta  R. B.
Ilustración de la cubierta  R. B.
Depósito legal
Impreso en Cumaná

cronista40@hotmail .com
academia.sucre@gmail.com
Cel. 0416-8114374
















INTROITO



EMINENTE MÉDICO

DR. SALVADOR CÓRDOVA


Forma parte de la legión de grandes hombres que entregó la prodigiosa Cumaná a Caracas, a toda Venezuela y al mundo, en el siglo XX. Entre los médicos figuran además de Salvador Córdova, a su lado Luis Felipe Blanco, Diego Carbonell, Jesús Sanabria Bruzual, Baldomero Benítez, Arturo Guevara Rivas, Juan Marcos Imery, José Tomás Jiménez Arráiz, David Lobo Sénior, Juan Pietri, Francisco de Paula Rivas Maza, Jesús Maria Rivas Mundarain, Manuel Russian y otros que sería prolijo mencionar.
    
El Dr. Salvador Córdoba, formidable médico cumanés nacido en esta fecha, que después de intenso y meritorio trabajo, fundando de la primera clínica hospital privada de Caracas, hoy Maternidad de la Policlínica Caracas, con lo cual fue precursor de los hospitales privados modernos. Recibió múltiples homenajes, solo como ejemplos mencionaremos: Medalla de Oro del concurso internado del Hospital Vargas; Premio Rafael Herrera Vegas; Premio Especial de la Academia Nacional de Medicina, etc. Fue profesor de medicina de la Universidad Central de Venezuela,  se destacó como cirujano, como humanista, escritor y académico. Fue individuo de número de la Academia Nacional de Medicina. Rector de la dicha Universidad  en 1936. Miembro fundador del Colegio de Médico del Distrito Federal. Todo esto y mucho más. Dejó un importante legado en el ejercicio de la medicina que honra al pueblo de Cumana. En Cumana formó parte de la generación  de escritores de la revista “Broches de Flores” donde estaban José Antonio Ramos Sucre,  Domingo y Marco Tulio Badaracco, Luis Teófilo Nuñez, Juan Miguel Alarcón, Matías Acosta, Manuel de Jesús Alvares, José María Milá de La Roca Díaz, etc. Su biógrafo Gabriel Briceño Romero, dice que “Nunca se ha aislado del mundo de la cultura y de las letras, gracias a esa devoción suya por las cosas superiores del espíritu, posee un estilo propio, directo, castizo e inconfundible que lo señala también, como un literato sutil y refinado”.  Este gran médico cumanés espera el bronce y el elogio de su pueblo.

Ficha técnica de la Academia de Medicina del Dr. Salvador Córdoba. -17-
Fue electo Individuo de Número el 30-11-1919, para el Sillón XXII. Se incorpora el 06-02-1922 con su trabajo titulado “Datos para la historia de la cirugía en Venezuela: la primera colecistectomía” Fue presidente del 6º Congreso Venezolano de Ciencias Médicas en 1955. Se graduó de doctor en medicina (1911), su tesis doctoral versó sobre, “El tratamiento quirúrgico de las metritis crónicas”. Realizó curso de posgrado en la Sorbona, París, en medicina, cirugía, obstetricia y anatomía. A su regreso de Francia fundó la Clínica Córdoba. Fue Rector de la UCV en 1936. Profesor titular de clínica terapéutica quirúrgica. Presidente de la Sociedad Venezolana de Cirugía y Miembro Honorario de la misma en 1951. Fue presidente de la Sociedad Venezolana de Historia de la Medicina y Miembro Emérito de la Sociedad Internacional de Cirugía. Doctor Honoris Causa de la Universidad del Zulia. Perteneció a diversas instituciones sociales, científicas, gremiales, culturales, en nuestro país y en el exterior. Fue amante de la música y tocaba el piano magistralmente.











                                                                                                          
DIEGO CÓRDOVA´


El Dr. Diego Córdova, nació en Cumaná el doce de diciembre de 1891,   recordamos  al político revolucionario, compañero de Pedro Elías Aristeguieta, escritor y poeta cumanés, y por ende a su hermano el eminente médico Dr. Salvador Córdova, al que menciono otra vez  porque ambos formaron parte indiscutible de aquella generación de científicos, literatos y periodistas, que figuran en la vanguardia de la cultura venezolana del siglo pasado; entre los cuales, por ser de la misma generación cabe mencionar algunos,  que se nos vienen a la memoria pero hay tantos más que llenaríamos esta página y faltarían nombres:  José Antonio Ramos Sucre, Andrés Eloy Blanco, Marco Antonio Saluzzo, Cruz María Salmerón Acosta, José María Milá de la Roca Díaz, Jacinto Gutiérrez Coll, Manuel Norberto Vetancourt, Pedro Elías Gutiérrez, Estanislao Rendón, Arturo y  Humberto Guevara, Domingo y Marco Tulio Badaracco B., Luis Teófilo Núñez, Delfín Ponce Córdoba, Federico Madriz, Jesús Sanabria Bruzual, Diego Carbonell, Ramón David León, Juan Miguel Alarcón, Dionisio López Orihuela, Alberto y Luis Beltrán Sanabria, Eliso, Joaquín y Agustín Silva Díaz, José Agustín Fernández, J.M. Rondón Sotillo, J.A. Cova, Napoleón Blanco, Antonio Machado, Paco Damas Blanco, y una decena más,  que dieron lustre a esa generación de intelectuales.

Fue Diego un espíritu revolucionario que se opuso a toda suerte de dictaduras. Durante el gobierno de Juan Vicente Gómez, perseguido  va al exilio, se acoge a México, donde trabaja como maestro y desarrolla su obra literaria y  ejerce el periodismo.
En 1935, cuando muere Juan Vicente Gómez, con prestigio bien ganado,  regresa a Venezuela; pero vuelve a México como Embajador y Ministro Plenipotenciario, allá se casa y  procrea 4 hijos. Al ser derrocado don Rómulo Gallegos en 1948, renunció a la embajada y se quedó a vivir en México.      
Diego Córdoba dejó como legado su ejemplo y una obra literaria de numerosos títulos, tales como “La Ciudad Marinera y Mariscala’, “Venezuela Agonizante”, “Soñadores en el destierro”, “Miranda Soldado del Infortunio”, “Caracas de la bohemia“ y otros.
Eduardo Avilés Ramirez, dice de él, que “…es uno de esos hombres modernos, pero en el fondo dignos descendientes de los héroes de Plutarco; y agrega que era “…poeta, periodista, diplomático de larga carrera, héroe civil, a veces hasta Quijote…”
Miguel Ángel Mudarra nos dejó una corta nota sobre este eminente Cumanés, dice: ¨Escritor Cumanés que ha elaborado una obra fina constante de varios libros enriquecido el patrimonio literario de Venezuela. Como luchador político fue un consecuente antigomecista por lo que estuvo largo tiempo desterrado, habiendo residido principalmente en México. Es periodista, su carrera diplomática deparó a la Nación magníficos vínculos con los países en que la representó, entre ellos México mismo. Fue embajador en algunas naciones europeas. Su obra perdurable es la de escribir.  Entre otras obras ha escrito ¨Caracas de la Bohemia¨, nutrido de caraqueñísimo típico; Miranda, hermosa biografía del Precursor. Continúa residiendo en México; pero periódicamente regresa a la Patria, y  se dirige a Cumaná. Es un vehemente admirador de Andrés Eloy Blanco  y de su gloria poética. Se espera mucho de su creadora pluma.   
Y el excelso  poeta Andrés Eloy lo glorificó en el soneto que lo  eleva a la eternidad:

Desde que al corazón le dolió un ala
la usó en volar a la ciudad porteña
la de la luna con que el sueño sueña
la del río de amor con que resbala.

Del mar al pan de miel que la desala
desde el golfo a la chara ribereña,
cruzó sin pasaporte o contraseña
la Ciudad Marinera y Mariscala.

Tu ciudad mi ciudad, la ciudad nuestra
donde busco al varón en cuya diestra
la espada es flor y la bondad capullo;

y allí con él, digo tu nombre, Diego,
y al corazón del Mariscal entrego
tu corazón tan bueno como el suyo.



Nosotros, en Cumaná, lo vemos como un exaltado que adjetivó a nuestra ciudad para siempre  con el exergo: ¨Cumaná la ciudad Marinera y Mariscala”. 
Tenemos de él muchos poemas que lo  identifican con nuestra escuela poética, veamos: 

¡Oh dama!
Recuerdas ¡Oh virgen! de formas divinas
la euritmia sublime de Venus triunfal,
y pienso que eres al ver que caminas
gentil y ritmante cual un madrigal.

Deshójase el verso del bardo que admira
la rosa de minio sutil de tu boca,
y dulces cadencias te brinda su lira
al ver que tu gracia de ángel provoca.




Veamos al poeta visto por el Cronista de Cumaná,

Dr. José Mercedes Gómez.

Diego Córdova nació en Cumaná el 12 de diciembre de 1891. Formó parte de una generación notable de escritores y poetas de relevante obra literaria que constituyó más significativo aporte de su generación a las letras Cumanesas y de significativa figuración en la literatura venezolana de todos los tiempos. Fue coetáneo de José Antonio Ramos Sucre, Andrés Eloy Blanco, Luis Teófilo Núñez, Alberto y Luis Beltrán Sanabria, Humberto y Arturo Guevara, Marco Tulio Badaracco y tantos otros que sobresalieron en la literatura, la historia, el periodismo y las ciencias médicas, como su hermano el Dr. Salvador Córdova, señera figura de las ciencias médicas venezolanas. Asistió como los jóvenes de su época al instituto de educación  secundaria que con el nombre de Colegio de Cumaná fundó en 1905, y dirigió durante muchos años,  su pariente el insigne educador José Silverio Córdova, luego de aprobadas con excelentes calificaciones los estudios de primaria.

Al finalizar los estudios secundarios se dirige a Caracas para la educación superior. Eran los tiempos de clausura de la Universidad Central en el primer septenio del régimen de Gral. Juan Vicente Gómez.

            Decidido opositor del régimen, se adhiere a los grupos juveniles que combaten la férrea dictadura del gobierno. Como muchos otros toma el camino del exilio y se residencia en Méjico, donde vivió hasta 1936 cuando regresó a Venezuela. Fue en Méjico donde desarrolló su obra literaria, ejerció el periodismo durante sus muchos años de exilio, así como la noble profesión de Maestro. Aquí contrajo matrimonio. Dos hijos, varón y hembra, fueron los frutos de esa unión.

            Finaliza la dictadura, con justa razón para quien fue decidido demócrata, paradigma del gentilicio cumanés y destacado representante de las letras venezolanas en el exterior, ingresa en la carrera diplomática. Designado embajador y Ministro {Plenipotenciario de Venezuela en Méjico, desempeñó con distinción y brillantez.

            Al ser derrocado el gobierno de Don Rómulo Gallegos, renuncia a la Embajada y con la hidalguía de siempre combate con la pluma y con los hechos el nuevo régimen dictatorial. Su casa de Méjico es el hogar de los exiliados de 1948, como lo fue también para los exiliados del Gomesismo. A el dedicó Andrés Eloy Blanco el bello soneto que sirve de pórtico a este libro, la Ciudad Marinera y Mariscala, editado por primera vez en Méjico en 1958, y que hoy reeditamos en forma facsimilar.

            Residenciado en Méjico durante muchos años, fue en este país donde realizó su obra literaria. Entre los varios títulos publicados señalaremos: Venezuela Agonizante. Méjico 1926; Poemas de Ayer y de Hoy. .San José de Costa Rica 1943; Bolívar y Roosevelt. Guatemala 1947. Soñadores en el Destierro. Méjico 1950; Miranda Soldado del Infortunio. Méjico 1954; Presencia y Poemas de Juana de Ibarboroug. Méjico 1954; Caracas de la Bohemia. Méjico 1955; Vida del Mariscal Sucre. Méjico 1959; Los Exiliados de Juan Vicente Gómez. Méjico. 1959.

            Como podemos observar, fue en la ciudad de Méjico donde se editaron la mayoría de sus libros, quizás por ello es ignorada su obra en nuestro país. Solo es conocida por algunos biógrafos y escritores. Posiblemente, a esto se debe que, su nombre no figure en el Diccionario de la fundación Polar (1988).


            Nosotros hemos encontrado en el antiguo periódico “Renacimiento” de Cumaná cinco sonetos, que insertamos en esta segunda edición de la presente obra, así como el epigrama que escribió, tal vez una de sus primeras producciones poéticas para la bella señorita Elvira Ducharne, cuyo original nos facilito el Dr. Luis Delfín Ponce Ducharne, hijo de quien seria ulteriormente Doña Elvira Ducharne de Ponce.

No hay comentarios:

Publicar un comentario